Con el objetivo de promover la venta de autos más seguros en el continente africano, Global NCAP realizó una prueba de seguridad a varios modelos populares en dicha región, entre ellos el Nissan NP300, KIA Picanto, Hyundai i20 y Toyota Yaris. Los modelos seleccionados obtuvieron una calificación media de tres estrellas menos el pick-up de Nissan que no obtuvo ninguna.
El Yaris utilizado es un vehículo subcompacto importado desde Tailandia y en su configuración estándar trae sólo dos bolsas de aire. En 2017 este pequeño hatchback de Toyota fue evaluado por ASEAN NCAP, logrando las cinco estrellas. Para ese momento, la unidad sometida a las pruebas contaba con siete bolsas de aire que incluía de serie en su mercado de origen.
Según los estándares de Global NCAP, la protección para el pecho del conductor fue calificada como marginal y existe la posibilidad de sufrir lesiones en el área de rodillas por partes del tablero. Además, su estructura fue clasificada como inestable. El Yaris utilizado en esta ocasión contaba con frenos ABS, control de estabilidad, bolsas de aire frontales, aviso de cinturón de seguridad para las plazas delanteras y los anclajes ISOFIX.