Toyota correrá las 24 horas de Le Mans 2019 con la misma ventaja de la que disfrutaron en la edición anterior de esta carrera. Los TS050 Hybrid podrán completar 11 vueltas entre parada y parada, mientras que los LMP1 no híbridos –Rebellion, SMP Racing, ByKolles y DragonSpeed–, tendrán que parar cada diez vueltas, según informa Motorsport.com.
Que Toyota tuviera stints más largos formaba parte del Equilibrio de Tecnología aprobado al principio de la temporada 2018-2019 del Mundial de Resistencia. La marca japonesa accedió a eliminar esta condición para Fuji para dar más opciones a los equipos privados, pero ahora la recupera.
El director técnico de Toyota Motorsport, Pascal Vasselon, ha recordado que las diferencias entre el uso de combustible de los Toyota y de los equipos privados son “enormes”. “Hablamos de un 35%. No podríamos soñar con una demostración mejor de ventaja de eficiencia de un sistema híbrido”, ha apuntado Vasselon.
Las restricciones en LMP1 están pensadas para que Toyota tenga una ventaja de dos segundos en el garaje, aunque uno de los equipos privados asegura que tendrán casi cinco segundos. El combustible máximo que pueden usar los equipos privados por stint es de 50,8 kilos para autos con motor aspirado y de 48,4 kilos para motores turbo.
Estos cambios se explican por la menor entrega de energía híbrida y el menor uso de combustible por kilómetro que hay en Le Mans en comparación con carreras más cortas. Además, los TS050 Hybrid pesarán 888 kilogramos en Le Mans, diez más que en las 24 horas del año pasado de esta carrera de resistencia.