Desde hace un tiempo, Toyota estudia la posibilidad de aumentar su familia SUV con la introducción de un nuevo todoterreno. Un crossover urbano de segmento B que llegaría a los concesionarios para hacer frente a los nuevos modelos que han irrumpido en escena. Dicha idea sigue tomando forma y está más cerca de materializarse en un vehículo de producción.
La aparición de la nueva generación del Yaris en Europa es clave en los planes de la marca. ¿El motivo? Este SUV de segmento B, lo tomará como punto de partida. Será un modelo realmente importante ya que está llamado a rivalizar con modelos similares como el Nissan Juke, entre otros.
Este nuevo modelo, por ahora sin nombre, se posicionará en la gama un escalón por debajo del actual C-HR. A pesar de que el C-HR es más pequeño que sus principales rivales, la marca piensa que un modelo más cercano a los cuatro metros de longitud le permitirá ampliar de manera notable su cartera de clientes. Además, el segmento B-SUV está concentrando buena parte de la demanda de todoterrenos que hay en Europa.
Matt Harrison, Vicepresidente Ejecutivo de Toyota Europa, realizó unas interesantes declaraciones al medio especializado Auto Express asegurando que estaban estudiando las posibilidades de introducir un modelo inferior al C-HR: “El segmento B-SUV también está creciendo, haciendo que clientes bajen del segmento C. Así que estamos mirando, evaluando, y vemos en número creciente de jugadores haciendo eso. Puede haber oportunidades en el futuro. La plataforma es lo suficientemente flexible como para soportar algo así, seguro”.
La base elegida para este nuevo SUV no es otra que la plataforma GA-B, una variante de la arquitectura TNGA de Toyota. Dicha plataforma es usada por el nuevo Yaris europeo. Ahora bien, la relación que mantendrán ambos modelos irá mucho más allá que de la simple arquitectura. A nivel estético estará influenciado en gran medida por la nueva generación del Yaris.
Con base a la información disponible actualmente sobre este futuro modelo, existe un render (ilustración) que muestra cómo se vería el diseño del próximo SUV de Toyota. Será un poco más largo que el Yaris y adoptará los rasgos característicos de cualquier crossover. Una suspensión sobreelevada, defensas de plástico recorriendo la parte inferior de la carrocería y una barras de techo para acentuar la sensación todoterreno.
Debajo del capó, posiblemente adoptaría un impulsor híbrido 1.5 con unos 115 hp. Para la presentación todavía habrá que esperar, aunque se especula que su primera exhibición sea en la segunda mitad de este año para llegar al mercado en 2021. En América Latina todavía siguen las incógnitas si este modelo o el Raize (derivado del concepto DN-Trec), podrían ser los encargados de ocupar un lugar en la planta brasileña de Sorocaba, siempre y cuando la marca no sorprenda con algún otro utilitario deportivo.
