La autonomía, el tiempo de recarga y el precio son los tres factores clave del que depende el éxito y el fracaso de los autos eléctricos. Las marcas están implicadas al máximo para lograr que el primer factor aumente lo necesario para aumentar el atractivo teniendo en cuenta que, cada vez son más híbridos enchufables los que ofrece un millar de kilómetros sin repostar, por lo que estos son hoy la opción más interesante para los que apuestan por la electrificación.
Rebajar el tiempo de carga en los eléctricos es más complicado, solamente al alcance de los modelos más lujosos del mercado, y el precio en todos los segmentos es la misión más complicada, si no imposible. Toyota sabe la fórmula, la misma que le ha hecho ser líder del mercado mundial en la venta de modelos híbridos, y estuvo a punto de hacerlo también con los eléctricos. Pero los nipones se dieron de bruces con una realidad que, lejos de rechazar, reconocieron y se pusieron a trabajar para lanzar una nueva generación de modelos antes de la próxima década.
Ahora, Toyota se ha asegurado la producción exclusiva de baterías desarrollada por la empresa japonesa Primeearth EV Energy Co., cuyo 80,5 por ciento de la propiedad se encuentra en manos de la marca dirigida por Akio Toyoda desde hace cuatro años. El 19,5 por ciento que quedaba en manos de Panasonic pasará a finales de mes a la marca, asumiendo todo el control. No es para menos teniendo en cuenta que estos han desarrollado la «batería del futuro», un arma poderosa para dar el deseado golpe en la mesa de los modelos eléctricos.
Por ejemplo, el nuevo Mercedes CLA será uno de los eléctricos con mayor autonomía entre los compactos con hasta 800 kilómetros. La mitad de la nueva batería que venderá Toyota a partir de 2028, aunque con la importante diferencia de que esta última será de estado sólido. Todavía así, la marca nipona no decepcionará a los clientes, porque su cronograma pasa por ofrecer, en un plazo de dos o tres años a lo sumo otras nuevas baterías que llegarán hasta los 1.100 kilómetros.
Antes, a finales del próximo año, el bZ4X original estrenará una nueva batería de iones de litio de última generación con más del doble de capacidad actual -168 kWh frente a 71,4 kWh brutos- y, por ende, el doble de autonomía, entre 800 y 1.000 kilómetros. Suficiente para cautivar a los clientes, con el plus de ser una quinta parte más barata y con la que quiere conseguir los 1,5 millones de unidades de eléctricos vendidos en todo el mundo en 2027, y dos más en 2030.