Hace unos meses que Toyota dio un importante paso adelante metiéndose de lleno en una categoría del mercado en la que no había estado presente durante muchos años, la de los compactos más deportivos presentando el tercer modelo salido de los talleres de GAZOO Racing: el nuevo GR Corolla. Un verdadero hot-hatch, que será muy deseado como esperado en todo el mundo, aunque se desconoce si se quedará solo para los Estados Unidos y Japón o bien si llegará a otros mercados.
Pero los de Motomachi, Japón, han cumplido con una de las peticiones de su presidente, Akio Toyoda, presentar una variante más radical, un exclusivo GR Corolla Morizo Edition con unas cualidades y características que lo transforman en una verdadera máquina de altas prestaciones todavía más capaz y enfocado para su uso en pista. Los japoneses han seguido los pasos del extinto Volkswagen Golf GTI Clubsport, modelo con el que tiene mucho en común.
Estéticamente, no presenta variaciones con el GR Corolla convencional más allá de la pintura exclusiva «Gris Acero» mate y los detalles en negro brillante o las pinzas de los frenos pintadas en rojo, pero bajo la carrocería sí que hay importantes novedades. La principal es el ahorro de peso aplicado, reduciendo 30 kilogramos la cifra de la báscula para situarse en 1.440 kilogramos gracias al uso de aluminio en el panel del capó y de las puertas, mientras que el techo es de fibra de carbono. Los neumáticos son especiales para esta versión, unos Michelin Pilot Sport Cup de medida 245/40 R18.
Por otro lado, se ha eliminado la banqueta trasera sustituida por una pieza rígida y también el sistema de sonido. El GR Corolla Morizo Edition solo dispone de dos plazas, con dos asientos delanteros de tipo báquet con reposacabezas integrados tapizados en cuero negro y costuras de contraste, color también presente en la marca en la parte superior del volante forrado en napa. El cuadro de instrumentos es digital y dispone de una pantalla de 12,3 pulgadas que muestra informaciones tan relevantes como la presión del turbo, entre otras.
Toyota también ha retocado el propulsor para ofrecer un extra de prestaciones en el motor de tres cilindros y 1.6 litros turbo, desarrollando una potencia máxima de 304 hp y 400 Nm. Un pequeño aumento en el par motor máximo que, también, ha supuesto un reajuste de las relaciones del cambio acortando la primera, segunda y tercera. El sistema de tracción «GR-Four» es de serie, como también los dos diferenciales «Torsen» que equipa delante y detrás ajustables en relaciones 60:40, 30:70 y 50:50.