La nueva generación del Toyota Land Cruiser 300 Series se está gestando en las carreteras de Japón, cargado de camuflaje para no dejar ningún detalle visible. Un todoterreno de nueva generación que pretende dejar en evidencia a sus más inmediatos rivales, al menos en cuanto a tecnología.
La marca no ha oficializado ninguna noticia, pero se estima que es una gran novedad que verá la luz en abril, aceptando pedidos en marzo y entregando unidades a mitad de año. Estos plazos encajan perfectamente estas últimas fotos espía, las más reveladoras hasta la fecha y que proceden de Rusia, corresponden más con una unidad de presentación interna que de un prototipo, ya que la envoltura blanca es más propia de la protección que las marcas emplean para el transporte que para un vehículo de pruebas.
Dejado a un lado esta circunstancia, por fuera apenas se divisa un detalle interesante más allá de la cuadrada parrilla del radiador, y los finos faros delanteros que cuentan con cuatro proyectores de LED perfectamente apreciables. Pero, el protagonismo se lo lleva el interior, completamente al descubierto, y con un importante salto diferenciador, mucho más lujoso. Destaca el cuadro de instrumentos digital con esferas analógicas, detrás de un volante multifunción con insertos de aluminio satinado, y una consola renovada que está perfilada con unos listones de aluminio.
La pieza cuenta con una pantalla táctil del sistema de info-entretenimiento con 12 pulgadas, el módulo de climatización, teclas del sistema de sonido y de radio y descansa sobre el túnel de transmisión, previo paso de la unidad lectora de DVD. Toyota ha aprovechado los soportes laterales para instalar mandos adicionales. Entre esta pantalla y el cuadro de instrumentos se encuentra el botón de arranque del motor, equipado con un sensor lector de huella dactilar que adapta las diferentes configuraciones de asientos y espejos, entre otros.
En el túnel de transmisión, también dispone de los diferentes mandos de ajuste del chasis, de los modos de conducción y del sistema de tracción total, además del control de descenso de pendientes. Un auténtico arsenal de tecnología y detalles que aumentarán la exclusividad del Land Cruiser 300.