La crisis de los microchips ha tenido sus consecuencias en todo el mundo, con plazos de entrega de los vehículos que se retrasan varios meses debido a la falta de componentes para su fabricación. Pero en Japón la situación se ve agravada, en determinados modelos, ya que su éxito está alargando los plazos de entrega en hasta cuatro años.
Así lo ha reconocido oficialmente a través de su página web la compañía, que pide disculpas a sus clientes ya que los japoneses interesados en adquirir un todo terreno Land Cruiser 300 se enfrentan a una demora de cuatro años.
«Gracias por considerar y pedir nuestro vehículo. Nos disculpamos sinceramente por el hecho de que Land Cruiser ha sido muy bien recibido no solo en Japón sino también en todo el mundo, y se espera que tarde mucho tiempo en entregarlo después de recibir un pedido.
Dichas reducciones se llevarán a cabo en varios días en ocho de sus 14 fábricas en Japón, incluyendo las líneas de ensamblaje del modelo híbrido Prius y de los modelos de lujo Lexus
El plazo de entrega de los pedidos a partir de ahora puede ser de hasta 4 años. Haremos todo lo posible para acortar el tiempo de entrega de nuestros clientes, y agradecemos su comprensión», explica textualmente la marca a través de su portal en internet.
Toyota explica que el retraso no está relacionado con la escasez mundial de chips o la crisis de la cadena de suministro, sin profundizar en los motivos del retraso. justifica no obstante que se está ralentizando la producción en hasta 11 de sus fábricas en Japón debido al aumento de infecciones por Covid-19 entre sus trabajadores y proveedores de repuestos.
El mes pasado, Toyota anunció que extendería las paradas en algunas de sus fábricas en Japón, ya que seguía sintiendo el impacto de los problemas de la cadena de suministro. La caída de producción se estima en un 40%. La compañía aclaró que el plazo de cuatro años en el tiempo de entrega se ha calculado según las condiciones actuales de producción, por lo que tan pronto como se normalice la situación tanto en cuanto al abastecimiento de componentes como a las bajas debido a la pandemia, se podrían recuperar los plazos de entrega habituales.
El ahorro de costos con el famoso “Toyota Way” de fabricación ajustada, que se basa en tener el menor inventario posible para enfocarse en producir “de última hora”, podría ya no ser redituable bajo las circunstancias actuales
La producción en enero se reducirá en 47.000 vehículos, una vez que se tomen en cuenta los cambios más recientes, indicó la automotriz. En cuanto al año fiscal que concluye en marzo, Toyota no alcanzará el objetivo de nueve millones de vehículos que se había establecido, a pesar de la sólida demanda que tienen sus modelos.
Lanzado en 1951, el Land Cruiser es el vehículo más vendido de Toyota, con un total de 10,6 millones vendidos hasta agosto del año pasado.