El objetivo de la marca para 2025 es poner en el mercado 70 nuevos modelos electrificados, de los que 15 serán cien por ciento eléctricos. Con una cuota de mercado de vehículos eléctricos del 7% dentro de cuatro años, el 90% del catálogo de modelos de Toyota ofrecerá tecnología eléctrica: el 10% será cero emisiones y el otro 80% se repartirá entre los híbridos convencionales y los híbridos enchufables.
El plan de Toyota a largo plazo (2050) es convertirse en un fabricante neutral en carbono para lo que necesita abrir su catálogo a todas las tecnologías eléctricas que existen. Con 70 nuevos modelos electrificados en los próximos cuatro años, la estrategia de la marca se centra en la electrificación parcial a medio plazo. De ellos, 15 serán modelos totalmente eléctricos, pero el resto se distribuirán entre los híbridos, los híbridos enchufables y los vehículos movidos por hidrógeno.
Toyota no ha ofrecido detalles sobre las tipologías y los segmentos en los que se incluirán estos 15 modelos totalmente eléctricos. Su estrategia se centra en la imagen general del objetivo global de neutralidad climática. En Europa, es probable que continúe la apuesta híbrida de la compañía compartida, en un futuro cercano, con los modelos completamente eléctricos: de los 70 modelos electrificados anunciados, 55 se ofrecerán en Europa y el resto en otros mercados, a los que se unirán el nuevo Mirai y modelos movidos por hidrógeno que se presentarán en el futuro cercano.
La estrategia de marca es emplear un mix de tecnologías “para llegar más rápido y de forma más completa al objetivo de lograr la neutralidad de carbono a nivel mundial para el 2050”, asegura James Kuffner, Director digital de Toyota Motor Company. El fabricante continuará invirtiendo en todas las soluciones innovadoras que ofrecen bajas emisiones de carbono, “para garantizar que satisfacemos las necesidades de nuestros clientes en cada país y región”.
El conjunto de vehículos electrificados, contando todas las tecnologías aumentará a 1,5 millones de unidades, y la cuota de mercado se elevará a más del 7%. Según Toyota, al menos 150.000 vehículos, el 10%, estarán libres de emisiones a nivel local, lo que significa que se alimentarán de una batería eléctrica o de una pila de combustible de hidrógeno y otros 1,2 millones, el 80%, serán vehículos híbridos o híbridos enchufables. Esto significa que la proporción de vehículos electrificados será de al menos el 90% en 2025.
La plataforma eléctrica e-TNGA, desarrollada junto a Subaru, será la base de los modelos eléctricos de Toyota, que estrenará el que posiblemente sea su primer modelo eléctrico. El bZ4X será el que la estrene dentro de la marca, como representante de una futura serie de modelos que tendrán en común el pertenecer a la serie bZ. La compañía está invirtiendo en nuevas tecnologías de baterías (incluidas las de estado sólido), en motores eléctricos cada vez más eficientes y en una electrónica de potencia mejorada. En cuanto a la pila de combustible, Toyota no ha especificado su estrategia de desarrollo para el futuro, pero sí enfatiza que es consciente del “importante potencial ambiental del hidrógeno”
Sin embargo, a pesar de la electrificación, los motores de combustión interna también juegan un papel importante en su camino hacia la neutralidad climática; el hidrógeno como combustible y otras alternativas basadas en biocombustible se mencionan como campos en los que se desarrollarán sus proyectos de investigación y desarrollo. “Toyota tiene la responsabilidad de garantizar que todos y cada uno de sus clientes tengan la oportunidad de elegir el producto con las emisiones de CO2 más baja posible en el camino hacia la neutralidad del carbono, independientemente del mercado, segmento y presupuesto”.